La enfermedad del planeta

Cuando se clasifica a los humanos, se les suele poner en la categoría de mamíferos. Pero esto no es del todo correcto. Todos los mamíferos desarrollan instintivamente un lógico equilibrio con el hábitat natural que los rodea, pero los humanos no. Nosotros nos trasladamos a una zona y nos multiplicamos y seguimos multiplicándonos hasta que todos los recursos se agotan. Así que el único modo de sobrevivir es extendiéndose hasta otra zona. Existe otro organismo en este planeta que sigue el mismo patrón. ¿Saben cuál es? El virus.

Así es, el humano es la enfermedad de este planeta, que lo va consumiendo lentamente hasta acabar con él. De hecho, el humano le ha causado desgracias al planeta: tala de árboles, caza desmedida de animales, malgasto y contaminación del agua, entre otras. Y a pesar del daño que causa esto a corto-medio plazo, lo seguimos haciendo. Y sumado a esto, la gente se queja, sin siquiera aportar algo al planeta. Si se ponen a analizar el papel del hombre en la tierra, verán que el hombre causa daña a todo lo que lo rodea. Y cuando digo hacer daño, no sólo hablo de la Tierra, sino también de nosotros mismos. A lo largo de la historia ha habido esclavitud, explotación, dos guerras mundiales, y los miles de crímenes que se cometen al día, sin mencionar que consentimos que medio mundo muera de hambre cuando habría recursos suficientes para todos.

Y lo peor de esto es que se dice el ser humano es el animal más inteligente y evolucionado, cuando en realidad cualquier animal es mejor que nosotros. Los animales matan para comer, lo que necesitan y cuando lo necesitan, solo a otras especies de animales. Los animales son fieles a su pareja de por vida. Los animales no sienten odio.

Aunque debo admitir que es injusto clasificar a todas las personas de animales que quieren destruir el mundo. De vez en cuando aparece una persona con la intención de ayudar al mundo, y no me refiero a alguien que dé dinero en las latitas, me refiero a gente que dona su tiempo, su cariño, pasa tiempo con las personas necesitadas, es esa gente por la que vale la pena seguir creyendo en la humanidad.

Si les hablo de esto, no es para que odien a la raza humana, sino para que tomen conciencia de todo el mal que puede causar el ser humano. No les pido que se conviertan en santos, les pido que sean mejores seres humanos, que dejen atrás sus odios, que vayan superando sus defectos, así, podamos dejarle a nuestros hijos y nietos un planeta con amplios bosques y agua limpia, donde la gente se ayude mutuamente y no haya violencia ni injusticias. 

Matias J. Moreno